El primer día subieron desde el fondo del valle a uno del cimas más emblemáticas del Pallars y que con sus 2853 se convierte en una de las cimas más altas de la región. Pasaron por las muy bien conservadas bordas de Noarre, un pequeño pueblo donde no llega carretera y donde se puede revivir el espíritu pallarès a pleno pulmón.
El segundo día se caracterizó por la travesía de diferentes valles y para adentrarse dentro de territorio francés en la región del Ariege, donde los valles son profundas y verdes y donde todo se convierte en salvaje y virgen, gracias a lo poco transitado que se encuentran los caminos de esta región.
La última jornada se caracterizó por la ascensión a la Pica d’Estats pico emblemático que con sus 3.143 metros es el más alto de Cataluña, una vez alcanzada la cima descendendieron de nuevo hacia el Pallars donde les esperaba un transporte que les llevaría el punto de inicio de la ruta en donde recogieron los coches para el regreso.
Aquí tenéis las fotos de este gran trekking.
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